No ficción
Las pampas
Antes de dedicarse de lleno a su oficio de corresponsal de guerra, el joven Edward Frederick Knight (1852-1925) zarpó en su yate Falcon desde el puerto de Southampton rumbo a Sudamérica junto a tres amigos y un grumete. Era la tarde del 20 de agosto de 1880. El objetivo del viaje era explorar el Río de Plata y remontar sus caudalosos afluentes Paraná y Paraguay. EF Knight relató su travesía de veinte meses por Latinoamérica en su libro The cruise of the Falcon —puede traducirse como La expedición del Falcon —. La primera edición fue publicada en 1884 en Londres y aunque tuvo varias reediciones en su lengua original, la obra nunca fue traducida al español.
Este pequeño fascículo titulado Las pampas reúne la traducción de dos capítulos donde EF Knight relata el itinerario desde Buenos Aires a Fraile Muerto, actual Bell Ville. Es el comienzo de una expedición por tierra que culmina, capítulos después, con una cabalgata por Córdoba, Santiago del Estero y los bosques tropicales del Tucumán. Durante todo ese trayecto, que les llevó varios meses, el yate Falcon permaneció amarrado en Tigre, a carga del grumete.
En Las pampas van a poder presenciar una imponente tormenta desguarnecidos en medio del campo; asistir a los carnavales de Rosario; realizar un paseo en sulky entre las florecitas silvestres del campo; van a conocer un brutal método para apagar incendios rurales; viajar en un confortable vapor de pasajeros por el río Paraná con música de piano incluida; acodarse con el criollaje en la barra de la pulpería de Cañada de Gómez; entrar en la posada de Carcarañá y asistir esa misma noche, en ese mismo lugar, a un casamiento con baile; conocer las instalaciones de la estancia del señor Kemiss, uno de los mejores criadores de caballos de Sudamérica; disfrutar del paisaje por la ventanilla de los flamantes vagones del Ferrocarril Central Argentino; y, parados en campo abierto, van a poder vislumbrar a la distancia una familia de venados de las pampas, una especie ya extinta en nuestra región.
Edward Frederick Knight (1852-1925) nació en Inglaterra. Se recibió como abogado pero se lo conoce principalmente como corresponsal de guerra y como un precursor de la navegación en pequeñas embarcaciones. Estuvo presente en muchos de los numerosos conflictos bélicos que se dieron durante el cambio de siglo entre potencias imperialistas y sus colonias. A los 48 años, mientras cubría la Segunda Guerra Boer en Sudáfrica, perdió un brazo en el campo de batalla. Fue un autor de referencia de libros relacionados con la navegación a vela, tanto de crónicas sobre sus viajes como de manuales técnicos.