Cuentos

La última virgen comunista

"Durante toda la mañana, el altavoz estuvo anunciando que los trabajadores se habían apoderado oficialmente de la escuela, que todos los estudiantes y los maestros debían regresar a la escuela para ser reeducados por la clase trabajadora".

"En la ciudad del deseo, ser virgen era una broma, un pecado".

Siete historias, independientes pero interconectadas, que son una ventana a las transformaciones de la cultura china y a la amarga vida del exilio. A través de una variedad de los personajes una niña que ve demasiado, un anciano que vuelve a su irreconocible patria, una virgen adaptándose a la metrópolis del pecado y de lugares desde la China de Mao a las actuales ciudades llenas de rascacielos, pasando por el Chinatown neoyorquino, estos cuentos recorren la historia moderna del gigante asiático.

Wang Ping nació y creció en Nankín, China. Se mudó a Taiyuan en 19351​ y más tarde se mudó de nuevo en 1937 tras el estallido de la Segunda Guerra Sino-Japonesa, lo que la motivó a participar en el activismo de izquierda. Recorrió el país actuando en obras de orientación política que apoyaban la resistencia china antes de establecerse en Shanghái cuando terminó la guerra en 1945. El feminismo liberal de izquierda se convirtió en una gran influencia para Wang al principio de su vida​ y fue una defensora de la revolución comunista durante mucho tiempo. Trabajó en estrecha colaboración con el Partido Comunista tanto antes de la revolución como después del establecimiento de la República Popular China.